General Pico, Viernes 25 de Abril de 2025
Lunes a Viernes de 7:00 a 9:30 hs - FM Láser

RADIO LÁSER 98.5 EN VIVO

NOTICIAS

18-05-2018
Compartir
Tweet
Imagen nota
Historia del día: Bájenme al loro, bajen al gato,,,¡Paren un poco!
No es cuento. Esto pasó hoy y en Pico…, provocando la intervención de los Bomberos Voluntarios

En orden cronológico, ya acercándonos al mediodía, el grito desesperado: ¡bajen a mi loro por favor!, lo escuchó el bombero atento que recibió el llamado en la sede de calle 102 y Fraternidad.

El pedido llegaba desde el barrio Ranqueles, calle 500, entre 527 y 530. Era la voz de una mujer mayor que, con mucha angustia, le intentaba explicar al servidor público, que el loro que ella tenía, supuestamente dentro de su casa (no sabemos si en una jaula o qué), se había subido a un enorme álamo que está en su predio y no lo podía bajar.

Y, aunque cueste creerlo, los bomberos tienen que acudir ante los pedidos de ayuda de la sociedad, incluso un caso sí.

Se aseguraron que no sea una broma y ahí fue la cuadrilla con escalera, arneses y otro equipamiento. La señora los recibió, pidió disculpas por el pedido y les aclaró: “Pepe, no vuela, pero no se baja de la planta..”.

Pepe, el loro, había subido a la parte alta del árbol y el miedo a que cayera era muy grande.

Fue así que nuestros queridos bomberitos, fueron por el loro en las alturas. Pero ¡vaya sorpresa!: El loro se espantó ante la presencia cercana y ¿qué hizo?:  tomó vuelo y, vaya a saber por dónde anda.

La primer sorprendida era su dueña  o, la que creía serlo, que se quedó esperando que Pepe vuelva y termine con su angustia.

Los bomberos cargaron todo en el móvil, volvieron a la base, lamentándose por el desenlace.

No pasaron más que una hora que, el teléfono 100 volvió a sunar... ¿La Señora?. No, otra mujer, en este caso directivo de la escuela 26 pidiéndole que concurran,  porque alumnos de un aula del establecimiento advirtieron que había un gato atrapado entre el techo y cielorraso y que aparentemente no podía salir de ahí.

Otra vez a armar la cuadrilla, elementos para este  nuevo rescate y… a la escuela.

Los chicos y la maestra colaboraron al indicarle la ubicación donde estaba el gato. Cuando los bomberos llegaron a divisarlo, el felino salió “como tiro”, conocedor de todos los recovecos de esa parte de la estructura del edificio escolar. Es decir, el gato no estaba atrapado ni transitando su séptima vida, sino que este recorrido –evidentemente-lo hace a diario buscando: asistir a clase o por alguna presa conocida.

Los bomberos con una mezcla de sensaciones volvieron a la base nuevamente.

El día no terminó todavía.,Pero,pregunta para  a la comunidad en general: ¿No les parece que estamos abusando de la generosidad de nuestro querido Cuerpo de BomberosVvoluntarios..?