El lunes, una mujer había sido damnificada en 70 mil pesos, como publicó ayer LA ARENA.
Fuentes policiales dijeron que el modus operandi en ambos casos fue similar. Una mujer, que se hace pasar por abogada, llamó a dos vecinos y les dijo que alguien de su familia recibiría un resarcimiento económico, por un fallo judicial, y luego los hizo enviar datos desde un cajero automático y, allí, accedió a sus cuentas bancarias.
El miércoles, un veterinario (51 años) de la localidad recibió un llamado vía whatsapp de una «abogada» que se identificó con un nombre y le dijo que «su padre -fallecido hace unos años- se le otorgaría una suma de 686.880 pesos por tener un fallo a favor de un juicio iniciado en 1977», señaló un vocero policial.
«Le pidió al hombre que vaya hasta un cajero automático, y éste accedió. Siguió las instrucciones a través del teléfono, y cambió la contraseña del homebanking. Cuando minutos después abrió su cuenta desde homebanking constató el faltante de 200 mil pesos de una cuenta corriente y 50 mil de una cuenta de caja de ahorro», agregó.